sábado, 3 de octubre de 2015

El Mejor Sexo De Mi Vida

Soy un hombre de 32 años con un cuerpo deportivo en esta ocasión mi nombre será Víctor y les quiero relatar una situación que como muchos creí que no me podía pasar y probé el sexo anal y me ha gustado a este es el relato.

Pues todo comenzó en una de esas ocasiones en las que te encuentras con una chica de esas que se caen de buenas y no puedes dejar de babear por ellas, la conocí en un bar al verla ella vestía unos pantalones entallados de esos que están pegados a la piel y no dejan nada a la imaginación con un color negro brillante haciendo resaltar sus muslos en piernas y nalgas era algo de lo que pocas veces puedes llegar a ver. Le combinaba en el torso con una blusa blanca con la espalda destapada apenas unida por unos delgados tirantes horizontales y de frente un llamativo escote que dejaban ver gran parte de sus tetas.

Al ver tal escultura frente a mis ojos no pude evitar acercarme a ella y invitarle un trago a lo que ella accedió si ningún inconveniente después de unos trago y de una agradable conversación fui subiendo la temperatura poniendo mi mano en su pierna y hablándole de una situación más intima invitándola a salir con unas palabras susurradas al oído ya que la música era un poco alta. Salimos del bar tomándola de la cintura y llevándola a mi auto en donde continuamos una conversación mientras nos dirigíamos a un motel. Una vez en el motel entramos a la recamara entre beso y beso me tiro a la cama desabrochándome los pantalones y sacando mi verga dándole satisfacción de libertad pues no podía retenerlo más bajo los pantalones, lo tomo con una de sus manos y dándole unas suaves carisias placenteras de arriba hacia abajo y para darle una mejor lubricación le puso un poco de saliva esto me pareció algo excitante. Me despojo total mente de los pantalones y de mi calzoncillos dejándome totalmente desnudo de la cintura hacia abajo, saco un par de listones de su bolsa y me ato las manos a la cabecera de la cama esto me pareció excitante pues nunca había hecho esto a pesar de que ya lo había pensado. Después de atarme continuo con la mamada en la verga siguiendo en los huevos succionando cada uno y me levanto las piernas y me dio una tremenda mamada en el culo o más bien un beso negro esto me dio un placer extraño cuando introducía su lengua entre mis nalgas empecé a experimentar un deseo de penetración ella lamio su dedo medio y lo introdujo en mi ano yo experimentaba un sabor agridulce entre placer y dolor que poco a poco el dolor fue desapareciendo hasta convertirse en placer emitiendo unos ligeros gemidos de placer. Ella por fin se desnudó completamente y puso su panocha sobre mi cara para que le diera una mamadas hasta llegar al puto de sentarse completamente en mi cara mientras trataba de mamar y disfrutar la miel que escurría de su panocha ella solo gemía se levantó de mi cara para sentarse e introducirse la verga en su panocha pero de tanta excitación que yo ya tenía no puede aguantar mucho y me corrí dentro de ella, cosa que le molesto y con una cara morbosa me dijo que me castigaría así que sin previo aviso introdujo su dedo medio en mi culo haciendo me sentir gran placer que me hacía gemir ella con una sonrisa pícara saco le bolso un plug que introdujo en mi ano que me dio un gran placer y me ponía a pensar en cómo me cogerían en realidad por el culo mientras mi verga se paraba nuevamente. Se levantó y nuevamente puso su panocha en mi cara haciendo un 69 hasta que por fin sentí un fluido que se dejó venir en mi cara tapando mi nariz y boca mientras ella daba un fuerte grito de placer así mismo dejo exprimida mi verga n dejo ni una gota de leche en ella.

Hoy en día nos seguimos viendo pero cada día me gusta más como son nuestros encuentros aunque pienso en talvez algún día algún encuentro con algún hombre mas no sé cómo valla a ser el encuentro pues no me suelen atraer. Pero si sucede aquí lo tendrán.




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